Conure

 ¿Un loro que no grita como una alarma de incendio? ¿Una mascota que te sigue como si fueras su serie favorita? Eso, y más, es un Conure. Un pájaro con más actitud que una abuela con WiFi nuevo. Y no lo digo por decir.

A ver, que estas aves—también llamadas cotorras del sol o periquitos del arcoíris (vale, lo inventé)—han ido conquistando hogares de forma silenciosa… o no tanto, porque algunos chillan que flipas. ¿Magia? No. Biología, cariño.

¿Qué narices es un Conure?

Básicamente, un "Conure" no es una especie, sino un rollo de clasificación para varios tipos de cotorras. Vienen de América Central y del Sur, viven en plan tropical y tienen toda la vibra de “oye, préstame atención o grito”. Técnicamente, pertenecen a la familia Psittacidae, subfamilia Arinae. O sea, primos segundos de los loros grandes, pero sin tanto ego.

Esto me recuerda a cuando vi uno en un mercado callejero de Quito… bueno, da igual.

Detalles de fábrica (sí, como los del coche)

• Tamaño: De 22 a 40 cm (algunos parecen versiones pequeñas de un dragón de colores).
• Peso: Entre 60 y 120 gramos. O sea, menos que tu taza de café matutina.
• Color: Verde, amarillo, naranja, rojo... como una ensalada psicodélica.
• Esperanza de vida: Hasta 30 años. ¡Uf! Como un Tamagotchi que nunca se rompe.
• Personalidad: Curiosos, juguetones, pegajosos. Casi como un crush tóxico, pero con plumas.

Hábitat en la naturaleza

Viven en selvas húmedas, bosques secos y otros lugares que huelen a lluvia fresca y hojas mojadas. Se mueven en grupillos y montan más escándalo que un chat de grupo familiar.

¿Cuántos tipos hay? ¡Muchos, vaya!

Tabla comparativa express:

Especie	Nombre común	Vida útil	Cosas que molan (o no)
Aratinga solstitialis	Cotorra del sol	25-30 años	Más color que un grafiti. Pero chillona, eh.
Pyrrhura molinae	Green-cheeked	20-25 años	Más calmada, ideal pa’ novatos.
Aratinga auricapilla	Cabeza azul	20-30 años	Azul de cabeza, juguetona, simpatiquísima.
Aratinga jandaya	Janday	25-30 años	Como la del sol, pero menos drama.

¿Demasiado info? Pues espera, que lo bueno viene ahora.

¿Cómo se porta este plumífero?

¿Te quiere?

Sí. Con pasión. Se te sube al hombro como si hubieras nacido para eso. Y a veces, literalmente, no te deja en paz. Cariño puro.

¿Hace ruido?

Depende. Hay conures que parecen estar todo el rato en una llamada de Zoom (sin mute). Otros, más tranquilos, tipo modo avión. La cosa es que si se aburren, te lo hacen saber. A gritos.

¿Genial? Más bien... cuestionable.

Menú del día: ¿Qué come un Conure?

Aquí la cosa se pone seria. No todo lo que les gusta es bueno pa’ ellos.

Base obligada:

• Pellets especiales (nada de pipas todo el día, por favor).
• Frutas: manzana, papaya, mango, plátano.
• Verduras: zanahoria, brócoli, espinaca… ¡pimiento también!

¡Prohibido!

• Aguacate (sí, ese del brunch caro).
• Chocolate, café, cebolla, ajo.
• Semillas de manzana y durazno: tóxicas. No te la juegues.

Casa ideal: jaula o mini castillo

• Tamaño mínimo: 60x60x90 cm.
• Rejas horizontales: Pa’ que trepen como Spiderman.
• Juguetes: No uno. Varios. Si no, te taladran el alma a chillidos.

Ah, y las perchas: que sean de madera natural. Nada de plástico cutre, que luego te mira mal el veterinario.

Tip de compi: Cambia el papel del fondo cada dos días (o más si huele raro). Lávate los comederos. No seas un desastre, vamos.

Salud y drama: lo que puede ir mal

Problemas típicos:

• Psitacosis (¡Googlealo, pero no te asustes!).
• Hígado mal por dieta chunga.
• Pico raro por aburrimiento extremo.
• Infecciones respiratorias. Como nosotros con el aire acondicionado mal puesto.

Prevención básica:

• Buena comida.
• Limpieza constante.
• Chequeo anual con veterinario.
• Juguetes, tiempo libre y amor (parece una app de citas esto).

Cómo enseñarles cosas (sin volverte crazy)

Entrenamiento básico:

• Refuerzo positivo: premios, mimos, bailecito de victoria.
• Palabras como “sube” o “ven”.
• Sesiones cortas, tipo 5 minutos. Constancia, no intensidad.

Socialización:

• Déjalos conocer gente, pero sin presión.
• Premia lo bueno. Ignora el drama.
• Nunca, NUNCA, los fuerces. Ni con la abuela.

¿Y con niños o mascotas?

Sorprendentemente, bien. Con supervisión, claro. No queremos que el niño lo confunda con un juguete o que el gato lo vea como aperitivo.

¿Es compatible con perros? A veces. Depende del carácter de ambos. No hay fórmula mágica.

¿Cuánto vive esta criatura?

Ya lo dijimos, pero repito: entre 20 y 30 años. No es un capricho de un finde. Es una relación larga. Más que tu último noviazgo, probablemente.

¿Dónde comprar uno (sin terminar en la cárcel)?

• Criaderos certificados.
• Refugios de aves.
• Nada de comprarlos “por ahí”.
• Verifica papeles CITES si aplica en tu zona. Pregunta, no muerde.

Precios:

150 a 800 USD. Varía según especie y si el bicho ya sabe bailar o no (es broma... o no).

Preguntas que seguro te haces (o deberías)

¿Hablan?

Algunos imitan palabras simples, sí. Otros solo chillan con gracia. No esperes un Shakespeare con plumas.

¿Son escandalosos?

Las del sol, sí. Las verdes, menos. Tú decides el nivel de ruido que puedes aguantar sin volverte loco.

¿Son buena idea como mascota?

Si tienes paciencia, sí. Si te gustan los retos, también. Si te flipan los animales con carácter, bingo.

Cierre: más que una mascota, un compañero de locuras

Adoptar un Conure es comprometerte con una bola de energía que quiere ser parte de tu vida. Te observa, te responde, te echa de menos. Y a veces... te lanza caca con precisión quirúrgica. Pero te quiere, eso seguro.

¿Lo mejor? Vienen en todos los colores menos el gris (ese lo pones tú, si no te animas).

¡Dale amor a esta guía! Comparte con tu grupo de “locos por los pájaros”, comenta si ya tienes uno (o si tu vecino tiene uno que no deja dormir), y no te cortes en preguntar. Estamos aquí pa’ eso, ¿no?